Año 2024.

Los Iluminatis y Reptilianos, alienígenas de origen extradimensional, han sido expulsados de las Pléyades por las poderosas especies Anfibias y Mántides de Orión. Ahora, controlan Zazión, un planeta que orbita junto a dos satélites en torno a la estrella Glowalis, en los confines de la Vía Láctea.

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Desde su nuevo dominio, estos seres han impuesto su sistema de poder piramidal, ejerciendo su control absoluto sobre la galaxia y sometiendo a la humanidad. A través de tecnología holográfica, adoptan formas adaptadas a su entorno, influyendo en la Tierra mediante lobbies que manipulan gobiernos, medios de comunicación y economía global.

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Su verdadero propósito va más allá del dominio físico: buscan capturar ánima, la energía vital inmortal que habita en los humanos. Gracias a experimentos genéticos realizados desde la aparición del Homo sapiens, los seres humanos se han convertido en portadores de esta energía, esencial para la supervivencia y el poder de los Iluminatis.

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La extracción del ánima se realiza en el momento de la muerte del contenedor humano, pero con el tiempo, los alienígenas perfeccionaron métodos de abducción en vida, obteniendo esta energía directamente de los cuerpos aún vivos.

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Desde el sistema Glowalis y su planeta Zazión, estos seres controlan y dirigen la existencia humana. Somos su experimento, su fuente de energía… su espectáculo eterno. Nuestra civilización no es más que una pieza en su gran juego, observada, manipulada y alienada desde el origen de nuestra especie.

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Pero los Iluminatis no son los únicos que acechan la Tierra. Más de cincuenta especies alienígenas del multiverso cuántico —habitantes de dimensiones paralelas y estados energéticos desconocidos— han puesto su mirada en este pequeño planeta.

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La lucha por el control del ánima está a punto de comenzar.